Existe aún en estos tiempos una manera de pensar de
los consultores sobre la implementación de ERP’s, CRM, BI enfocado en ellos
mismos, dejando de lado peticiones, que no necesariamente son funcionales, sino
operativas de los usuarios. Esto a la larga conlleva a tener sistemas difíciles
de manejar o inconclusos y por ende un requerimiento de capacitación mayor para
los usuarios. Pero si nos ponemos a analizar el porqué de este enfoque de los
consultores, debemos notar algo muy importante de estos software ERP’s, CRM, BI;
nos damos cuenta que cada vez estos tienen menos de intuitivos y más de
complejos, la empresas fabricadoras por tratar de cubrir los máximos requerimientos
de las organizaciones, no se dan cuenta la complejidad que se está generando.
Si bien es cierto que en una organización puede haber procesos muy complejos y
tediosos de simplificar para el usuario, el consultor debe tener esa visión y
capacidad de poder acoplar lo mejor posible los requerimientos de una organización
al software, y dar a los usuarios la mejor opción.
También nos podemos encontrar con usuarios que al ver
el trabajo que se está realizando, puede solicitar cosas fuera del alcance o
hasta utópicas, como por ejemplo un botón mágico que les diga la situación económica-financiera
mensual, trimestral, anual de la organización con un valor único, es decir o se
está ganando o perdiendo.
En una implementación de este tipo de software de gestion las
variables de éxito son bastas, pero enfocándonos
en el diseño del software, el consultor debe saber elegir que software cumple con
los requisitos para una implementación optima, como: usabilidad, accesibilidad,
visibilidad, lógica, entendimiento, reducción de errores, mejores prácticas,
interactividad, accesos rápidos, distinción de mensajes, rendimiento, ayuda
iterativa, trazabilidad.
Lo único que no debe olvidar el consultor es:
“No es lo que hace el software, es lo que hace el usuario”.
Saludos.
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